Diario de librera. El verano y la libertad







Los Libros de Francesc Torres


El verano no ha dado tregua, tampoco el calor. Encendimos hace unas semanas el ventilador. Las páginas pasaron solas, también los días. Lo más difícil quedó atrás. El desierto de agosto llegó ayer a su fin. 

No sabíamos si el convencimiento general de que se lee mucho en verano iba a ser una fe para nuestros libros. 

Lo que sí hemos descubierto es que es en verano cuando la gente arregla sus casas, se muda o cambia de pareja y siempre lo que le pesa son los libros.

Ahora las colinas se desarrollan pared arriba y toman cualquier repisa nueva que pongamos. Y sí, muchos han salido rumbo a la playa, hacia el aeropuerto o a cualquier sofá tres calles más arriba. Pero aun hay muchos más.

Hemos pensando en hacer muebles con ellos, calentarnos el próximo invierno o hacer una torre en el jardín. Y lo que hemos decidido es dejarlos en libertad, abandonados estratégicamente para que los encuentres.

 El viernes 13 de septiembre nos parece un buen día para la redención. Al que le apetezca participar, empezaremos a las 19:00 horas desde La sala de máquinas.