Presentación en El Generador


Estamos empeorando y esta vez sin remedio. Ahora vamos a presentar el engendro en Santa Cruz de Tenerife, esa ciudad famosa por su cultura endogámica, sus socavones patrimoniales y sus vistas a la refinería. Un paraíso.

Será el sábado 3 de diciembre en El Generador, a las 20:30 h.

El Generador está dirigido por gente desconcertante y piadosa, de otra forma no se explica que nos hayan permitido presentar allí La nación de los olvidados, la antología de Omar Salle que acabamos de publicar.

No saben que se mezclan con lo peor: indigentes, alcohólicos, falsificadores, lectores y ciclotímicos. Habrá que agradecerles la locura.

 Presentarán, si no los detiene la policía en estos días, Stefano Piana, Óscar García García y María José Alemán.

 Dejo por aquí las ilustraciones de dos de los autores incluidos en esta Antología de escritores universalmente desconocidos. 

    El primero es Norton Slovenko grabando a varios narradores y protagonistas de fama: al perro de la poeta inglesa Elizabeth Barret Browning, y al que Virginia Woolf dio voz en su novela Flush, al Mister Bones del Tombuctú de Paul Auster, al Buck de Jack London en La llamada de lo salvaje, al Terranova de Byron ("Poseíste belleza sin vanidad, fuerza sin crueldad, y todas las virtudes de los hombres sin ninguno de sus defectos"), todo en un coloquio de perros muy cervantino. 


La siguiente es Teresa Malfatti, una romana que no viajó, pero que escribió literatura de viajes, o para ser más exactos, inventó ese subgénero de la literatura de viajes entendida como una variante de la ciencia ficción.  Ella fue la pionera. Ahora son muchos los autores de literatura de viajes que practican esa confortable variante.






Doble sesión y esquela




Se acerca la presentación de la primera Antología de escritores universalmente desconocidos, preparada por Omar Salle. Será el martes 15 de noviembre en el Café 7 (C/ El Juego, 7, La Laguna) a las 20:30.

Hoy sabemos que habrá doble sesión esa noche, y tras la presentación del libro actuará el músico Ruskin Herman, que es este señor con mandolina. 




Uno de los escritores antologados en La nación de los olvidados es Sandro van Doren, inventor de la literatura funeraria concebida como un ajuste de cuentas. 

Su trabajo era ingrato: satisfacer a la familia del difunto con unas palabras que lo retrataran. Rara vez cobraba lo acordado. 

De la primera época se recuerda esta esquela de vanguardia: 

Manuel Salle Meneses dice, por despedirse, que aún está en su casa, en el garaje. Háblenle a la foto o pasen a recogerla. Y si quieren rogar por su alma, préstensela a otro. 

Natural resulta que Sandro van Doren tuviera un chirlo que le adornaba la cara, marca de un cliente insatisfecho. El corte fue obra de un hijo rabioso y descontento con el retrato que el escritor le dedicó a su padre, que era maestro de sustracciones, mezquindades y ginebras.

Por su afición a los cementerios Salle quiso retratar a San van Doren en su mejor momento. 

Este fue el resultado: 
En alguna de esas lápidas debe estar borrándose su nombre.

Si quieren saber más de los autores antologados, esa caterva infame, en el libro encontrarán una biografía detallada y una breve antología de cada autor. 

El martes 15 es la presentación. Actúan María José Alemán, Óscar García García y Bruno Mesa.